Bienvenidos a Aiora Hostel, donde nos apasiona compartir la riqueza cultural y arquitectónica de Valencia. En esta ocasión, nos adentraremos en la imponente Catedral de Santa María, un símbolo emblemático de la ciudad que cautiva a visitantes de todo el mundo. Prepárate para descubrir la fascinante historia, la majestuosa arquitectura y las actividades que hacen de esta catedral un destino imprescindible en tu viaje.
Historia

El sitio donde se ubica la Catedral de Valencia ha sido lugar de adoración desde la época romana, al albergar un templo dedicado a Júpiter o Diana, cuyas columnas aún se conservan en el Museo de la Almoina, junto a la catedral. Durante la época visigoda, esta área fue testigo de la construcción de la primera iglesia cristiana, sobre los cimientos del antiguo templo romano. Posteriormente, con la conquista árabe, el lugar se transformó en la sede de la mezquita de Balansiya (Valencia en árabe). No fue hasta el siglo XIII, con la reconquista cristiana liderada por Jaime I, que el lugar recuperó su función como iglesia cristiana.
La estructura principal de la Catedral de Valencia se levantó entre los siglos XIII y XV, mayormente en estilo gótico. Sin embargo, su construcción se extendió a lo largo de varios siglos, lo que resultó en una amalgama de estilos artísticos, desde el románico temprano hasta el neoclasicismo más contenido. Esta combinación de estilos es una característica destacada que convierte a la Catedral de Valencia en una joya arquitectónica universal.
Excavaciones en centro arqueológico

Las excavaciones realizadas en el Centro Arqueológico de la Almoina han revelado restos de la antigua catedral visigoda del siglo V, que más tarde fue transformada en mezquita. Aunque décadas después de la conquista cristiana en 1238, la mezquita-catedral permaneció en pie, adornada incluso con versos del Corán en sus paredes, fue en 1262 cuando fray Andreu d’Albalat tomó la decisión de demolerla y construir en su lugar una nueva catedral según los planos del arquitecto Arnau Vidal. Para su construcción se utilizó material de canteras locales y también de otras regiones más lejanas como Benidorm y Jávea, transportando las piedras por mar.
La simplicidad y sobriedad de la Catedral de Valencia se explican en parte por la urgencia con la que se construyó para marcar el territorio cristiano frente al musulmán, así como por el hecho de que no fue una obra de lujo patrocinada por algún monarca, sino un proyecto financiado principalmente por la burguesía local.
Construcción
Aunque el paseo por el interior de la catedral es fascinante y nos lleva de un estilo a otro de manera fluida, se trata de un edificio con planta gótica de tres naves, crucero cubierto con cimborrio, girola y ábside poligonal.
La construcción de la catedral se realizó de manera gradual, adaptándose a medida que se derribaba la mezquita existente. Hacia finales del siglo XIII, ya se había completado el deambulatorio o girola con sus ocho capillas y la puerta románica de la Limosna en el brazo oriental del crucero.
Entre 1300 y 1350, se finalizó la construcción del transepto o crucero por el lado oeste, añadiendo la puerta gótica de los Apóstoles. También se edificaron tres tramos de las tres naves y se inició la construcción del cimborrio.
Capilla del santo cáliz

La antigua Sala Capitular, actualmente la capilla del Santo Cáliz, y la torre campanario del Micalet se erigieron originalmente de forma independiente, pero en 1459 se inició la ampliación de las naves de la catedral en un tramo más, conocido como Arcada Nova o Arcada de la Seu, uniendo definitivamente la catedral con la sala capitular y el Micalet. Desde entonces, la catedral tiene unas dimensiones de 94 metros de largo por 53,65 de ancho en el transepto.
Los siglos XV y XVI apenas influyeron en la arquitectura de la catedral, pero sí en su decoración pictórica y escultórica, como en el caso del altar mayor y la capilla de la Resurrección.
La puerta de los hierros
Durante el período barroco, en 1703 se diseñó la puerta principal de la catedral, conocida como de los Hierros, aunque su construcción quedó incompleta debido a la Guerra de Sucesión. Posteriormente, en el último tercio del siglo XVIII, se inició un proyecto de renovación neoclásica que modificó tanto elementos constructivos como ornamentales, eliminando pináculos y ocultando estructuras góticas bajo estucos y dorados.
En 1931, la catedral fue declarada monumento histórico-artístico, pero durante la Guerra Civil Española sufrió un incendio que provocó la pérdida de parte de su patrimonio artístico. Posteriormente, en 1940, se desmontó el coro y no se reconstruyeron los órganos dañados durante el conflicto.
Destrucción y creación
En 1970, se derribaron las casas de los Canónigos para devolver a la catedral su aspecto original y reducir elementos de poco valor arquitectónico. Dos años después, se inició un proceso de restauración que consistió en retirar elementos clásicos para recuperar el aspecto gótico original, conservando solo algunas decoraciones puntuales.
Actualmente, la catedral se encuentra en buen estado de conservación después de varias restauraciones y exposiciones realizadas en los últimos años. Ha sido declarada Bien de Interés Cultural por parte del Consejo de la Generalidad Valenciana.
Elementos Destacados

Entre los elementos más destacados de la catedral, sobresalen las imponentes puertas de los Hierros (de estilo barroco), Apóstoles (de estilo gótico) y del Palau (de estilo románico), así como en su interior la Girola, el Altar Mayor, el Cimborrio, la Nave Central y su prolongación conocida como Arcada Nova.
En cuanto a los aspectos singulares del exterior del templo, merece mención especial:
- La puerta del lado este, denominada de la Limosna y caracterizada por su estilo románico del siglo XIII.
- La pequeña capilla al norte, llamada de San Jorge, donde se celebró la primera misa en el siglo XIII.
- La arcada en el extremo noroeste, conocida como Obra Nueva y con influencias del renacimiento italiano del siglo XVI.
- La puerta del lado oeste, conocida como de los Apóstoles y con influencias del gótico francés del siglo XIV.
- El campanario, conocido como el Micalet y de estilo gótico valenciano del siglo XIV.
- La puerta del lado sur, llamada de los Hierros y con características barrocas del siglo XVIII.
En cuanto al interior del templo, destacan:
- El cimborrio, una obra maestra del arte gótico del siglo XIV, excepcional tanto por dentro como por fuera.
- La antigua sala capitular o capilla del Santo Cáliz, de estilo gótico tardío en la segunda mitad del siglo XIV.
- La girola, de estilo gótico valenciano del siglo XIII, mayormente decorada con elementos neoclásicos del siglo XVIII.
- El altar mayor o presbiterio, adornado con pinturas renacentistas del siglo XV y añadidos posteriores de estilo barroco del siglo XVII.
- Las naves principal y laterales, que presentan un estilo gótico valenciano de los siglos XIII al XIV.
La puerta de la limosna

La entrada principal de la catedral, conocida como Puerta de la Limosna o del Palacio, es un tesoro arquitectónico de estilo románico con influencias mudéjares, destacándose por su singularidad respecto al predominante estilo gótico del resto del edificio. Se presume que su construcción data del período entre 1262 y 1270, bajo la dirección de Arnau Vidal, aunque algunos expertos la sitúan incluso en el año 1240, poco después de la conquista del Reino de Valencia en 1238. Orientada hacia el este, sugiere la posible ubicación del mihrab de la antigua mezquita en ese lugar.
Diseño Románico
El diseño románico de la puerta, con elementos mudéjares de estilo leridano, se asemeja notablemente a la Puerta dels Fillols de la catedral de Lérida, datada alrededor del año 1220, lo que sugiere la posible influencia de maestros de Lérida en su construcción. En la parte superior del arco de la puerta se tallaron las cabezas de siete parejas de Lerida, quienes según la tradición, fueron los primeros pobladores cristianos de Valencia, acompañados por trescientas doncellas de Lerida para contraer matrimonio con los soldados que lucharon del lado de Jaime I. Bajo estas cabezas, se encuentra una inscripción con los nombres de estos pobladores.
Arco abocinado
La Puerta de la Limosna presenta un arco abocinado con seis arquivoltas de medio punto concéntricas que descansan sobre columnas finas con capiteles exquisitamente decorados. Las arquivoltas están ornamentadas con motivos vegetales y geométricos, así como escenas del Génesis y del Éxodo. En la línea de impostas, hay una cenefa con figuras de animales fantásticos. Además, en la parte superior, catorce canecillos con las cabezas de las siete parejas mencionadas sostienen el voladizo.
Sobre la puerta se pueden apreciar un ventanal gótico y otro a su derecha, descubiertos durante la última restauración de la catedral. Justo al entrar por la Puerta de la Limosna, a la izquierda, se encuentra la tumba del renombrado poeta Ausiàs March, con una inscripción de uno de sus poemas en reconocimiento a su legado literario.

Utilidad
La Catedral de Santa María de Valencia no solo es un monumento arquitectónico y religioso de gran importancia histórica, sino también un espacio multifacético que cumple diversas funciones para la comunidad local y los visitantes. Además de servir como lugar de culto y centro espiritual, la catedral desempeña un papel crucial en la vida cultural y social de la ciudad.
Eventos ceremoniales
Uno de los aspectos más destacados de la utilidad de la catedral es su función como escenario para una amplia gama de celebraciones religiosas y eventos ceremoniales. Desde misas y servicios religiosos hasta bodas, bautizos y funerales, la catedral acoge numerosas ceremonias importantes que marcan momentos significativos en la vida de las personas y comunidades.
Conciertos y Festivales
Además de su uso para eventos religiosos, la catedral también se convierte en un escenario impresionante para conciertos y festivales de música. Gracias a su magnífica acústica y su majestuosa arquitectura, la catedral ofrece un entorno único para disfrutar de actuaciones musicales de diversos géneros, desde música sacra y clásica hasta jazz y flamenco. Artistas locales e internacionales se dan cita en este espacio sagrado para compartir su arte con el público, creando experiencias culturales inolvidables.
Reliquias y obras maestras
La catedral no solo es un lugar de encuentro para expresiones artísticas contemporáneas, sino también un tesoro de historia y arte que alberga invaluables reliquias y obras maestras. Entre sus tesoros se encuentran reliquias sagradas, como el Santo Cáliz, que según la tradición cristiana se considera el cáliz utilizado por Jesucristo en la Última Cena. Además, la catedral alberga una impresionante colección de arte religioso, que incluye retablos, esculturas, pinturas y objetos litúrgicos de gran valor histórico y artístico. Estas obras de arte no solo son testigos de la rica historia de la catedral, sino también fuentes de inspiración y contemplación para los visitantes.
Localización

Ubicada en el corazón del casco antiguo de Valencia, la Catedral de Santa María es fácilmente accesible desde cualquier parte de la ciudad. Su ubicación central la convierte en un punto de referencia para los visitantes que exploran las calles históricas y los monumentos cercanos, como la Plaza de la Virgen y el Mercado Central.
Actividades
Además de admirar su arquitectura y explorar su historia, la catedral ofrece una variedad de actividades para visitantes de todas las edades. Desde visitas guiadas hasta conciertos de música sacra, hay algo para todos los gustos. No te pierdas la oportunidad de subir a lo alto de la Torre del Miguelete para disfrutar de unas vistas impresionantes de la ciudad.
Interés Turístico
La Catedral de Santa María es uno de los principales atractivos turísticos de Valencia, recibiendo miles de visitantes cada año. Su belleza arquitectónica, su rica historia y su importancia cultural la convierten en un destino imperdible para quienes buscan sumergirse en la esencia de la ciudad. No olvides visitar la Capilla del Santo Cáliz, que según la tradición alberga el cáliz utilizado por Jesucristo en la Última Cena.
Conclusión
En Aiora Hostel, te animamos a explorar la Catedral de Santa María de Valencia y descubrir todo lo que esta joya arquitectónica tiene para ofrecer. Desde su fascinante historia hasta su impresionante arquitectura, cada rincón de la catedral te transportará a través del tiempo y te dejará maravillado por su belleza atemporal. Ven y sumérgete en la magia de la catedral más emblemática de Valencia. ¡Te esperamos!